Los efectos de la pandemia han trascendido de gran manera en la industria bancaria en Chile. Los nuevos hábitos de los consumidores han promovido el avance de diversas herramientas digitales para la realización de las diferentes operaciones bancarias, teniendo como consecuencia el cierre de sucursales y la reducción del personal.
La nueva realidad de los bancos en Chile
Las largas filas de espera para ser atendido parecen ir quedando en el pasado. Lo cierto es que, la aparición del covid-19, sirvió como el principal impulsor de la digitalización del sector bancario en el país, provocando que las personas ya no sientan la necesidad de asistir a una sucursal para realizar una operación.
Por esta razón, muchos bancos han comenzado a cerrar sucursales y a reducir su personal, al no resultar rentable ante la escasa demanda física por realizar trámites bancarios y el fuerte avance de los canales digitales.
Así lo demuestran los datos entregados por la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) a julio de 2021, que revelan una reducción en los últimos dos años de un 11,7% del número de sucursales en el país, existiendo en la actualidad 1.788 oficinas bancarias, 237 menos que en el año 2019.
También, estos cambios han provocado una disminución en el número de personal ligado a la industria bancaria en Chile. Los datos de la CMF revelan que, en la actualidad, la fuerza laboral del rubro bancario la componen 55.468 personas, casi un 6% menos que la cifra registrada el 2019 (58.981), registrándose una pérdida de 3.513 empleos.
En particular, el Banco de Chile ha sido la entidad que más recortes ha realizado en términos de sucursales y personal, registrando el cierre de 108 oficinas en los últimos dos años y, una reducción en su personal de 1.102 trabajadores.
La digitalización: una nueva forma de hacer las cosas
Como te habrás dado cuenta, los recortes que han realizado los diferentes bancos tienen un denominador común: la digitalización.
En los últimos años, se ha vivido una verdadera explosión en el uso de canales digitales por parte de las personas para realizar sus operaciones bancarias, ya sean transferencias, depósitos o aperturas de créditos.
En este sentido, la CMF entrega datos reveladores:
- Hasta julio del presente año, existían cerca de 19,7 millones de clientes virtuales en la banca digital, registrándose un aumento de un 80% respecto al 2019.
- También, en el presente año, el número de operaciones bancarias realizadas a través de internet hasta el mes de julio, fueron cerca de 80 millones, casi un 20% más de transferencias que en el mismo período del año 2019.
- Por último, en julio del 2021, se registraron 403 millones de visitas a las páginas web de los diferentes bancos, un 46,2% superior a la cifra registrada en el mismo mes del 2019.
Sin duda que la flexibilidad y comodidad que representa la posibilidad de realizar operaciones en línea, sumado al miedo a contagiarse, ha generado un nuevo patrón de comportamiento en las personas.
De hecho, estudios muestran que casi el 64% de los chilenos realiza sus operaciones principalmente en línea, mientras que el 16,1%, dice nunca visitar alguna sucursal de su banco.
Como puedes ver, el fuerte avance de la digitalización tras la pandemia ha generado grandes cambios en la industria bancaria, incentivando a los bancos a desarrollar soluciones digitales que permitan entregar un mejor servicio a sus clientes.