Firma Digital: ¿qué es lo que no sabes acerca de ella?
La Firma Digital reduce los tiempos en trámites y disminuye muchos de los costes administrativos asociados a los documentos físicos. Por ello, se ha convertido en un mecanismo muy utilizado hoy en día, tanto en el sector público como privado.
Pero, aunque su uso está muy extendido en la actualidad, todavía existen dudas sobre su funcionamiento y validez legal.
A continuación, encontrarás todo lo que necesitas saber para sacar el mayor provecho a esta herramienta.
Tipos de firma digitalizada
Según la Ley 19.799, las firmas electrónicas pueden ser de dos tipos: Firma Simple (FES) y Firma Digital Avanzada (FEA).
La FES puede ser cualquier sonido, símbolo o proceso electrónico que facilite la identificación de una persona como firmante de un documento electrónico. Esto incluye formatos como:
- Imágenes escaneadas de una firma física.
- El nombre del firmante de un documento al cierre de un correo electrónico.
- Una imagen de la huella digital del firmante.
En cuanto a la Firma Digital Avanzada, la ley establece que debe estar certificada a través de un prestador de servicios, que se encarga de validar la identidad del titular.
Además, los datos son de exclusivo control de su propietario y están protegidos por mecanismos de cifrado, lo que ayuda a evitar delitos como la suplantación de identidad y el uso no autorizado.
Ejemplos de uso de la Firma Electrónica
Dependiendo del tipo de firma digitalizada, el tipo de uso que se le puede dar incluye:
Firma Simple
- Correos electrónicos y documentos que no requieren de validez legal.
- Trámites fiscales y documentos tributarios en el portal del Servicio de Impuestos Internos (SII).
- Facturación, notas de crédito y otros documentos tributarios.
- Uso como PIN para regular el control de acceso a sistemas controlados.
Firma Avanzada
La Firma Avanzada permite un proceso de validación que garantiza la misma validez jurídica que una firma tradicional. De hecho, su uso se ha extendido con el tiempo y ahora es posible utilizarla para actividades que tal vez no conocías, como la compraventa de inmuebles.
Adicionalmente, puedes usarla para suscribir:
- Contratos bancarios.
- Documentación laboral.
- Contratos de instrumentos financieros, como fondos de inversión.
- Productos del mercado asegurador.
- Certificados de revisión técnica y verificación.
- Pago Automático de Cuentas (PAC).
- Documentos mencionados en la NCG 12.
- Títulos profesionales.
- Recetas médicas.
¿Es segura la Firma Electrónica?
En este punto, es importante notar que la Firma Avanzada ofrece mayor respaldo en la digitalización de procesos que la Firma Simple. Esto se debe a que es emitida por una autoridad que garantiza la integridad de los datos asociados a su propietario.
Además, los documentos suscritos con Firma Avanzada no se pueden modificar y su contenido se protege mediante protocolos de encriptación. Únicamente su destinatario puede acceder a él.
Por otro lado, esta firma no puede falsificarse porque se basa en métodos de autenticación (como datos biométricos) y en una clave privada que solo conoce su propietario. De hecho, si olvidas tu clave, es necesario cancelar el certificado de firma y volver a crear una, pues las claves no se pueden recuperar.
En conclusión, la Firma Electrónica facilita la digitalización de procesos y te ayuda a realizar trámites seguros en línea. En ecert, puedes obtener tu firma simple o avanzada 100% online para comenzar a ahorrar tiempo y dinero en tus actividades diarias.